Pep Guardiola lo volvió a hacer. En plena conferencia de prensa, con su habitual tono calmo pero cargado de autoridad, el técnico multicampeón del Manchester City soltó una frase que resonó como un bombazo en todo el mundo del fútbol: “Lamine Yamal me recuerda a Messi cuando tenía 16 años”. La declaración, lejos de ser exagerada, muestra la magnitud del talento de este chico que viene haciendo historia en el Barcelona. Con apenas 16 años, Lamine ya juega como si tuviera una década de experiencia. Gambeta, velocidad, visión de juego y una zurda que ilusiona a los hinchas culés. Guardiola no es de regalar elogios. Pero cuando habla de fútbol, el mundo escucha. Y que haya puesto a Yamal en la misma oración que Lionel Messi, con quien trabajó codo a codo en la era dorada del Barça, no es poca cosa. Para Pep, la comparación tiene que ver más con la naturalidad con la que Yamal encara los partidos, su toma de decisiones y su forma de jugar “sin miedo”. “Leo tenía esa capacidad de decidir con frialdad en escenarios complejos. Veo algo de eso en Lamine”, completó. La frase no cayó en saco roto: en España ya lo ven como la nueva joya del fútbol europeo, y en Barcelona sueñan con que pueda liderar el equipo post-era Messi. Incluso en redes sociales, muchos hinchas no tardaron en subir compilados comparando sus primeros partidos, y los parecidos son realmente impactantes. Pero los que saben del juego ponen paños fríos: la presión mediática puede jugar en contra. Lamine Yamal todavía es un chico, y por más talento que tenga, el camino recién comienza. Por ahora, Pep le pasó la posta. Y si alguien sabe de talentos generacionales, es él.